El Sindicato de Personal Jerárquico y Profesional de Petróleo, Gas Privado y Energías Renovables de Cuyo expresó su preocupación por el retraso en la conclusión del proceso por el cual YPF busca desprenderse de campos petroleros maduros, en el marco de una reestructuración de la empresa . Al tratarse de recursos naturales de la provincia, Mendoza debe aprobar los acuerdos entre la petrolera estatal y las empresas postoras.
A principios de 2024, la nueva dirección de YPF, encabezada por Horacio Marín, presidente y director general de la empresa, anunció un plan de desinversiones en Mendoza y otras zonas del país, con el objetivo de cuadruplicar el valor de la empresa en cuatro años. . , dejando de lado las zonas de depósitos maduros. En total, el proceso en el país consta de 55 áreas, de las cuales 14 están en Mendoza.
“Una empresa como YPF no puede tener campos maduros. Eso es un error conceptual porque no es eficiente. Los campos maduros son para empresas medianas y pequeñas, no para empresas como YPF. Por eso estamos en las etapas finales con la firma de acuerdos”. “Con los gobiernos provinciales cuando llegué a YPF me dijeron que no lo íbamos a poder hacer y ahora vamos a lograr este nuevo ecosistema en el 2025”, dijo Marín al presentar el proyecto.
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Mientras continúa el proceso de venta de estas áreas, los trabajadores de esas zonas, que se encuentran paralizadas, han seguido recibiendo sus salarios, pero el gremio jerárquico de trabajadores petroleros teme que los tiempos se extiendan y los trabajadores resulten perjudicados.
El titular del Sindicato de Personal Jerárquico y Profesional Petrolero, Julián Matamala, en diálogo con el Correo, señaló que los trabajadores afectados en este proceso, aunque reciben su salario, “no pagan impuestos de jubilación, por lo que cuando van a jubilarse Se perderán un año, si esto se prolonga. A eso hay que sumarle los dos años de pandemia, que no fueron remunerativos.
El jefe de la jerárquica petrolera también afirmó que están de acuerdo con que nuevas empresas vengan a invertir a Mendoza “para mantener a la gente con empleo”, pero afirmó que “lo único que vemos es que no están haciendo mucho para tomar una decisión”. Queremos trabajar y sacar adelante a la provincia de Mendoza. El 43% de las regalías depende del petróleo, entonces si en enero no vemos avances, habrá que tener una medida de fuerza, porque la gente lo está pidiendo, lo quiere. volver a trabajar”.
Respecto a la venta de las áreas que está realizando YPF y la situación de los trabajadores petroleros, Matamala señaló que buscan que todos los trabajadores conserven sus puestos de trabajo. “Sabemos que puede haber alguna pérdida por jubilación voluntaria, pero de lo contrario no lo vamos a permitir”, afirmó.
“Mantuvimos contacto con el Gobierno hace mucho tiempo, pero no tuvimos muy buenos resultados”, comentó Matamala, quien agregó que “podemos tener buenos resultados si trabajamos juntos, espero que nos puedan dar el aval”. trabajar juntos.”
Respecto a los retrasos, el representante de las jerarquías indicó que “cree” que el Gobierno está “pensando bien en darle un buen resultado a la parte petrolera, porque las empresas lo único que hacen es extraer y no están invirtiendo nada”, y Advirtió que “si el Gobierno no hace nada, en enero se dará cuenta de lo que es jugar con los jerárquicos y los petroleros. Vamos a hacer huelga y vamos a parar todos los campos”.
En resumen, el gremio considera que existe un retraso injustificado por parte del Ministerio de Energía y Medio Ambiente para aprobar las transferencias de YPF a las empresas compradoras en 12 de las 14 áreas maduras, ya que se aprobó la venta de 2 de ellas: las zonas Llancanelo, en Malargüe.
La respuesta de Mendoza
El Ministerio de Energía y Medio Ambiente admite que se han ampliado los plazos, pero señalan que la responsabilidad de esos retrasos corresponde a YPF, porque es un proceso exclusivo de la petrolera estatal, con la correspondiente supervisión y autorización de la Provincia.
En este sentido, la Provincia asegura que la documentación llegó tarde en algunas operaciones, lo que implica retrasos en el análisis del plan de inversión y desarrollo de las áreas petroleras por parte de las empresas.
En total, son 14 áreas maduras: El Portón, Chihuido de la Salina, Altiplanicie del Payún, Cañadón Amarillo, Chihuido de la Salina Sur y Confluencia Sur (cluster Sur); Barrancas, Río Tunuyán, Ceferino, Mesa Verde, La Ventana y Vizcacheras (grupo Norte) y Llancanelo I y II.
La empresa Petróleos Sudamericanos compró las áreas incluidas en el cluster Norte, mientras que la Unión Empresarial Transitoria (UTE) entre TSB y Quintana Energy adquirió las áreas del cluster Sur. Por su parte, la Empresa Petroquímica (PCR) de Comodoro Rivadavia se hizo cargo de las zonas de Llancanelo (se aprobó el traspaso de estas dos zonas a PCR, el resto no).
Según el Ejecutivo, el análisis de la documentación también ha sufrido retrasos al haber empresas que hasta el momento no habían operado en Mendoza, por lo que se ha solicitado mayor documentación respecto del plan de desarrollo e inversiones. Sin embargo, las únicas dos zonas que ya cuentan con el visto bueno de Mendoza son las de Llancanelo, porque PCR es una empresa que ya operaba en Mendoza, lo que agilizó los procesos de autorización.
Desde Mendoza responsabilizan a YPF de los retrasos, ya que afirmaron que parte de la documentación necesaria llegó a Mendoza recién a finales de noviembre, retrasando los tiempos de análisis sobre la viabilidad de las operaciones. Sin embargo, aseguran que se están ejecutando las acciones necesarias para que el traspaso de las áreas a sus nuevos dueños se concrete y sea fructífero para que repunte la producción petrolera en la provincia.
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Días atrás, la ministra de Energía y Medio Ambiente, Jimena Latorre, comentó que el cluster Llancanelo ya cuenta con una resolución aprobando este traslado, mientras que “los otros dos clusters aún están en análisis”. A su vez, afirmó que los cesionarios hicieron concesiones a los requerimientos de la Provincia, “especialmente en los planes de inversión”.
Latorre aseguró que Mendoza “necesita actores del sector hidrocarburífero, que vengan a hacer inversiones más eficientes, y eso permitiría elevar los ritmos de producción de la provincia y han respondido favorablemente”.