Pequeñas y medianas empresas vinculadas al mundo de la viticultura Han extendido la solicitud a Gobierno de la Nación de los llamados Régimen de incentivos para grandes inversiones revitalizar el sector para los pequeños productores.
En este sentido, representantes de bodegas y asociaciones afines han asegurado que el sector necesita urgentemente inversiones modernizar sus procesos productivos, mejorar la calidad de los vinos y aumentar su competitividad en los mercados internacionales. En la misma línea, destacan que las condiciones actuales y los requisitos de la RIGI no traen ningún beneficio al sector.
Sergio Villanueva, directivo de la Unión Vitivincola Argentina, Alzó la voz en una entrevista publicada en el Diario San Rafael. “La viticultura es una de las principales actividades económicas de la provincia y no está contemplada dentro de este Régimen de Incentivos. En este rubro, incluso las grandes empresas son Pymes en relación a otras actividades. La verdad es que no me imagino una inversión de muchos millones de dólares. para implantar miles de hectáreas”, afirmó.
Fue así que el directivo de la UVA explicó que “la RIGI actual no es compatible con nuestras necesidades. Tendríamos que empezar a generar algunas ventajas para que esto no se distorsione. El monto mínimo de inversión requerido para acceder a la RIGI actual es excesivo para la mayoría “. de las PYME vitivinícolas, lo que las excluye de los beneficios del programa.
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Villanueva expresó su preocupación por las cargas tributarias. “La Corporación Argentina del Vino hizo un estudio con la Facultad de Ciencias Económicas y se determinó que el 57% del excedente de explotación se destina a impuestos. Hay una presión tributaria muy alta. Otorgar exenciones parciales o totales de ciertos impuestos para reducir la carga tributaria. de empresas que invierten en el sector, puede ser una solución”, añadió.
Finalmente, el directivo confesó: “Otra cuestión podría ser favorecer la incorporación de tecnología. El sector tiene que evolucionar según las exigencias de los mercados mundiales. Hoy en día se consumen bebidas con menor graduación alcohólica. Está ganando vino blanco. Por ejemplo, estamos exportadores de vinos tintos, pero Estados Unidos importa vinos blancos. Adaptarse a los cambios no es fácil, hay que impulsar un régimen que fomente las inversiones en el sector.