Presa El Carrizal tiene más de 50 años y requiere inversión permanente para que sus componentes estén en buen estado y se garantice la seguridad de la presa. Por esta razón, el Ministerio de Planificación e Infraestructuraa través de la Subsecretaría de Ordenamiento Territorial, Convocó a licitación para modernizar las válvulas de riego.

El acto administrativo donde se realizará la recepción y apertura simultánea de sobres, será el próximo 22 de mayo, a las 11, en el séptimo piso de Casa de Gobierno.

Se estima que las obras estén terminadas en 420 días, del acta de inicio y el presupuesto oficial de la obra básica es de $73.955.031,83.

Este trabajo permiten mejorar el componente hidromecánico del sistema de riego presentando dificultades operativas.

Presa El Carrizal.

Características e historia

La construcción de Presa El Carrizal comenzó el 30 de junio de 1965 y finalizó el 27 de noviembre de 1971. Está ubicado sobre el río Tunuyn y su función principal es abastecer de agua a una extensa área de riego de 85.000 ha.

También permite la atenuación de crecidas del río, la generación de energía eléctrica y usos recreativos.

Ver también: Continuarán con la exploración en la mina San Juan Filo del Sol

La presa es de materiales sueltos de eje recto, con una altura sobre el cauce de 46 my una longitud de 2113 m; permitiéndole almacenar
4620 hm3, el caudal medio anual del río es de 33,70 m3/s.

La planta cuenta con 2 turbinas tipo Francis, con una potencia unitaria de 8,50 MW y una generación media anual de 83 GWh. Actualmente, la represa y la central tienen una administración triple.

Es importante recordar que la concesión de la planta está en manos de la empresa CEMPPSA (Consorcio de Empresas Mendocinas para Potrerillos Sociedad Anónima) desde 1998 y es responsable de la operación y mantenimiento del área concesionada, que no incluye la presa, la obra de captación, el aliviadero y el sistema de riego.

Las obras de toma son mantenidas por el Departamento de Hidráulica, dependiente de la Subsecretaría de Ordenamiento Territorial, siendo esta una función delegada.

Las válvulas de riego son operadas por la Dirección General de Riego para dispensar caudales que no pueden ser evacuados por la planta y así atender la demanda de riego en cumplimiento de sus funciones.

La necesidad del trabajo

En los últimos años se han realizado inversiones para mejorar el accionamiento de apertura y cierre de las válvulas de chorro hueco, así como el mantenimiento de las obras de toma y conducción.

En esta oportunidad surge la necesidad de modernizar el componente
hidromecánica del sistema de riego
el cual presenta inconvenientes operativos para entregar caudales inferiores a 16 m3/s (caudal mínimo para operación de turbina) debido a su falta de precisión.

La imposibilidad de poder regular con precisión la entrega de caudales dificulta la provisión de canales de agua para riego y genera aumentos o disminuciones no programadas. que perjudiquen la normal evolución de los turnos de riego.

Te puede interesar: Así quedaron los aumentos obtenidos por los gremios del estado de Mendoza

El otro problema que presentan las válvulas de chorro hueco es la falta de velocidad de respuesta automática cuando las turbinas quedan fuera de servicio debido a eventos imprevistos. (corte de energía, falla electromecánica, etc.). Esto también provoca importantes pérdidas que afectan el sistema de distribución de agua en la cuenca, aguas abajo de la presa.

Por ello, se propone la operación remota de estos componentes desde la planta de Cacheuta. A esta necesidad se suma el mantenimiento de las válvulas mariposa pertenecientes también al sistema de riego de la presa.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *