En un mundo en el que las empresas tienden a convertirse en organizaciones basadas en datos, la nube se convierte en un activo digital.

En este contexto, “el gasto público en usuarios de la nube en todo el mundo alcanzará casi los 600.000 millones de dólares para 2023”, según un informe de Gartner.

Pero analizando ese gasto, en la industria hay costos innecesarios, en promedio, del 40%.

La falta de eficiencia en el uso de los recursos, la mala planificación y gestión de costes, la falta de optimización, las configuraciones no ideales y la falta de seguimiento y análisis son algunas de las razones de estos costes innecesarios en la nube.

Por ello, una vez que las empresas ya tienen un historial en la nube, es vital una evaluación revisión de costos de la nube, y un equipo dedicado exclusivamente a analizar la perspectivas ese resultado

El objetivo es entender dónde se gasta (servidores, almacenamiento, redes, etc.), que soluciones gastan (¿Es nuestra solución principal o estamos gastando en entornos de desarrollo de aplicaciones satelitales?), y finalmente estamos gastando de manera óptima? De esta forma podemos estar tranquilos en que lo que gastamos es necesario o no, y saber en que debemos optimizar costes.

Optimización de la nube: reducción de los costos de la nube

optimización de la nube es la forma en que una organización puede reducir los costos de la nube y mejorar los resultados. Es sinónimo de preguntar: ¿Cómo podemos hacer un uso eficiente de los recursos de la nube? La reducción de costes, la optimización del rendimiento sin perder de vista la seguridad y el cumplimiento normativo, podrían considerarse objetivos dentro de un enfoque de gestión. optimización de la nube.

La idea de la optimización es mejorar el uso de los recursos de la nube, para reducir costos y aumentar la eficiencia. Si queremos ampliar más el enfoque: es obtener datos, insights, recomendaciones para optimizar el flujo de trabajo y hacer un mejor uso de la nubey.

Para afrontar una hoja de ruta de optimización de la nube, bajando costes pero sin perder valor, se recomiendan algunas prácticas:

Detener el crecimiento que no beneficia al negocio: muchas veces las métricas de crecimiento de costos de la nube incluyen el crecimiento debido al volumen de negocio y nuevas iniciativas destinadas a mejorar nuestros productos, y uno que no es beneficioso.

Un ejemplo de lo segundo es tener más recursos de los necesarios u olvidarse de cerrar instancias o entornos que ya no se utilizan, recursos utilizados para pruebas/desarrollo que quedan sin utilizar pero utilizando recursos, retención de imágenes o copias de seguridad más allá de lo necesario, etc. . .

Parte de la buena práctica es identificar qué parte de la métrica de crecimiento del costo de la nube corresponde a cada tipo de crecimiento.

no tires todo por la borda Alineado con la metodología ágil, a veces rompiendo todo y comenzando de nuevo, tiene un costo mucho mayor y mayor riesgo en detrimento del valor.

Es preferible centrarse en pequeños ajustes. Experimentar en pequeño, medir y luego evangelizar internamente sobre prácticas saludables que puedan lograr un proceso de mejora continua.

Encuentre soluciones y prácticas elásticas: que permiten una constante modificación y adaptación. Esto permite pagar solo por lo que se usa, por el tiempo que se usa, olvidándose de los grandes costos de mantener la capacidad ociosa.

Aquí sugerimos revisar los acuerdos existentes con los proveedores y modificar lo necesario en cuanto a los planes de servicio. Esta práctica puede luego ser replicada para los nuevos servicios contratados.

¿Cuánto se puede ahorrar con la optimización de la nube?

Según la consultora McKinsey, este es el porcentaje de ahorro optimizando la nube en diferentes áreas:

• Libere la capacidad no utilizada y cambie el tamaño de la infraestructura de la nube (ahorre hasta un 25 %).
• Autoescalar (o disminuir) infraestructura con demanda variable en el tiempo (ahorrar hasta un 20%).
• Aproveche los descuentos de proveedores de la nube en diferentes tipos de planes (ahorre hasta un 25%).
• Usa instancias puntuales (instancias con fuertes descuentos) para servicios que no tienen tanta prioridad (ahorra hasta un 15%).
• Programe la disponibilidad de infraestructura para aquellos servicios que no tengan una demanda constante (ahorre hasta un 15%).
• Configure reglas automatizadas (ahorre hasta un 15%).

Identificar los recursos no utilizados, optimizar la cantidad exacta de recursos requeridos, detectar planes con descuento de los proveedores de la nube y usar instancias por debajo del precio de demanda son los caminos para un uso más eficiente de los recursos de la organización.

El trabajo iterativo, promover pequeños cambios, ser elástico e incorporar un proceso de mejora continua ayudará a las empresas data-driven a impulsar la inversión en cloud y asegurar que los objetivos entre finanzas, desarrollo y negocios estén alineados.

*Por Fernando Ruscitti, arquitecto de soluciones en Redbee