Lo que hace siete días era un rumor, un debate y pura especulación en las redes sociales se convirtió en un anuncio: el candidato a presidente de Estados Unidos por el Partido Republicano, Donald Trump, Prometió ayer que pondrá en marcha una “reserva nacional estratégica de bitcoins”.

La noticia fue un bombazo para el mundo cripto, que por primera vez se encuentra ante un candidato presidencial norteamericano que los visibiliza, los acepta y no los trata como nerds, estafadores, estafadores y criminales.

El mercado acusó recibo: el precio del bitcoin superó los 69.300 dólares por primera vez desde el pasado 13 de junio, pero luego el precio entró en fuerte volatilidad, cayendo más de dos mil dólares hasta los 67.000 dólares, moviéndose por estas horas en 67,8K.

Esta semana que comienza será clave para ver el impacto del anuncio de Trump en bitcoin. Por ahora, BTC volvió a repuntar después de encontrar un techo, una fuerte resistencia que flota por encima de los 70.000 dólares, y que no ha podido romper en mucho tiempo.

Ayer, en la Conferencia Bitcoin que se celebró durante tres días en Nashville, Estados Unidos, y que reunió a miles de criptomaníacos, Trump anticipó que nunca vendería los bitcoins que el gobierno ya incautó (más de 40.000), que usaría. más BTC para crear una reserva de valor, que quiere que el país sea la capital de la minería de bitcoin y que urge dar este paso porque si no China lo hará primero.

Trump, que compite por un segundo mandato presidencial al frente de la Casa Blanca, no dudó en comparar el bitcoin con la aparición del acero hace 100 años, para calibrar el potencial que tiene la criptomoneda en el futuro de la economía.

Para darse cuenta de que esta promesa de Trump sería seria, la senadora republicana Cynthia Lummis ya propuso que el Estado compre 1 millón de bitcoins para utilizarlos en el futuro para pagar deudas.

De esta manera, el candidato septuagenario, de 78 años, aprovechó la oportunidad no sólo para lucirse sino para arremeter contra sus rivales del Partido Demócrata, quienes desde la Casa Blanca aplicaron mano dura a la industria de las criptomonedas, acusándola. de blanquear dinero, evadir impuestos en materia fiscal y cometer estafas financieras, acusaciones que también son ciertas.

Mientras Trump asestaba golpes a sus rivales de gobierno en la Conferencia de Nashville, los demócratas entraron en pánico y en sus filas comenzaron a exigir un giro total en el discurso de campaña de las criptomonedas en voz de la actual vicepresidenta Kamala Harris, quien al mismo tiempo parece estar el nuevo candidato para reemplazar a Biden.

Mientras tanto, en el mercado las especulaciones y los rumores prometen dispararse. Uno de los líderes del Bitcoin y mayores tenedores de la criptomoneda, el empresario Michael Saylor, aseguró que en los próximos 20 años cada bitcoin podría valer 13 millones de dólares, una cifra que nadie se había atrevido a decir hasta ahora ni en sueños.

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