El juez de la Audiencia Nacional, José Luis Calamaordenó que el principal imputado por el caso arbistar, Santiago Fuentes, ingresa en prisión.

El magistrado consideró que el acusado estafó a más de 32.000 inversores con la comercialización de monedas digitales, entre los que se encuentran más de 50.000 argentinos.

Es un escándalo internacional por una supuesta estafa masiva con criptomonedas con sede en el Sur de Tenerife, España.

El magistrado tomó esta decisión siguiendo el criterio de el enjuiciamientoque advirtió que existe un alto riesgo de fuga para el imputado por la gravedad de las condenas que enfrenta.

Teniendo en cuenta que las penas pueden llegar a un máximo de 18 años de prisión.

Sumado a la posibilidad de acceder a los más de 92 millones de euros presuntamente defraudados. Estas medidas también fueron reclamadas por uno de los acusadores particulares.

El engaño se basó en una estafa piramidal

el primer arresto

El primer arresto de Fuentes por esta causa se produjo en la primera semana de octubre de 2020.

Hasta ahora había permanecido en libertad condicional con prohibición de salida del país y acudiendo a firmar en una sede judicial cada 1 y 15 del mes.

Sin embargo, la finalización práctica de la fase de instrucción aumentaba significativamente el riesgo de fuga, a juicio del magistrado Calama, por lo que atendió el pedido tanto de la Fiscalía como de varios de los perjudicados y decretó dicha orden de prisión.

Él caso arbistar surge en el Sur de Tenerife y habría dejado más de 100 millones de euros estafados y más de 30.000 perjudicados desde España a Irán, Bulgaria, Colombia o Argentina, entre otros países, según el citado juez.

La plataforma Arbistar prometió a sus inversores una rentabilidad de entre el 8% y el 15% mensuales, que pagarían semanalmente, siempre los sábados, dándoles la opción de sumar estos rendimientos a las cantidades invertidas u optar por el reembolso.

El bot de la plataforma era solo un engaño

Arbistar, un bot que nunca existió

“Ganar era la única opción”, decía la plataforma. Lamentablemente para los afectados, los que ganaron fueron únicamente los responsables de la web.

El algoritmo nunca llegó a existir. No es que el bot no siempre tuviera la razón, es que no existía directamente.

Supuestamente Arbistar estaba basado en un algoritmo con inteligencia artificial. Un algoritmo que técnicamente Santiago Fuentes, máximo responsable de Arbistar, mostró y explicó en Youtube en varios vídeos.